Durante más de 30 años un violador en serie violó a 54 mujeres (que se sepa, ya sabemos que muchas no denuncian) sin que nadie se tomase en serio el caso. A pesar de que actuaba en una zona pequeña, cerca de su casa, siempre a la misma hora, con la ropa y los zapatos de trabajo que eran fáciles de reconocer, y el olor a aceite que las victimas reconocían, nadie sospechó de los trabajadores de la fábrica de la zona. A todo el mundo le daba igual. Cuando finalmente lo pillaron, le cayeron tan solo 20 años de cárcel. Es decir, cuatro meses por cada violación.
Que barato sale destrozar la vida de las mujeres.
"El sistema legal perpetúa la violencia sexual al desacreditar y culpar a las víctimas". Andrea Dworkin.
"La violación es uno de los peores crímenes del mundo. Y pasa cada pocos minutos". Kurt Cobain.
Os informo que en LDL tienen un chorizo vegano que está exquisito. Lo he probado solo a la plancha, pero da el pego perfectamente. Otro día probaré a añadirlo a las lentejas. Un buen producto para consumir de forma ocasional, o llevar a una barbacoa.
La Luz de Gas o Gaslight es un tipo de maltrato que consiste en mentir o engañar con el objetivo de hacerte dudar de tu razón, incluso de tu propia cordura, para hacerte completamente manipulable, ya que no puedes confiar en tu propia mente, así que acabas creyendo o dando la razón a tu maltratador en todo, incluso si en el fondo sabes que no la tiene. Lo que ningún psicólogo te dice es que no solo te hacen gasligth familiares, amigos o parejas, también los medios de comunicación, los gobiernos, las grandes instituciones, etc.
Un buen ejemplo de esto es este presidente negando el confinamiento:
Si no hubo confinamiento, ¿Por qué la policía va a detener a esta pobre chica que sale a correr por el parque? No te pierdas los comentarios de los vecinos y el propio medio, insultando a la chica y acusándola poco menos de asesina en serie.
Sin entrar en el tema de si el covid existe o no, lo que es obvio para cualquiera con dos dedos de frente es que nadie sale a correr con pulmonía, y si no está enferma no puede contagiar nada a nadie (además de que estaba completamente sola, al aire libre). Pero pedir sentido común a la gente corriente es pedir demasiado.
Otro buen ejemplo de luz de gas es llamar "gestación subrogada" a la compra-venta de recién nacidos. Subrogar significa "sustituir"; un proceso biológico como el embarazo no se puede sustituir. Nadie puede respirar por ti, comer por ti, cagar por ti, ni embarazarse por ti. La mujer que se queda embarazada es la madre del bebé, que fabrica con su propio cuerpo, su propia carne, su propia sangre, extrayendo los minerales de sus propios huesos y dientes para formar su esqueleto. Es curioso que a las mujeres que comprar óvulos para quedarse embarazadas nadie les dice que son "hornos" o "incubadoras" de los bebés que han parido, aunque lleven el ADN de otra. ¿Será que para la sociedad, la madre es la que paga? Si tienes algo, en este caso un bebé, y otra persona tiene dinero, y te da el dinero para que le entregues el bebé, es una venta. Llamarlo de otra manera es MENTIR.
Es luz de gas llamar "violencia de género" a la violencia machista. ¿Violencia de "género"? ¿qué género, el literario, cinematográfico, terror, drama, western, comedia? La palabra género se usa para esconder la realidad: son los hombres los que maltratan, violan y matan, a la mujeres. Igual que preguntar tu género y no tu sexo ha sido una estrategia para abrir camino a la ideologia que borra el sexo real de las personas.
Es luz de gas llamar Ministerio de Igualdad al que debería ser el Ministerio de Feminismo. Con la excusa de la "igualdad", los cuirs, los travelos, los no binarios, los "género fluido" y demás personas delirantes se llevan todas las ayudas y campañas, y no mueven un dedo por las mujeres maltratadas y prostituidas. Aunque el ministerio tiene una gran partida presupuestaria, ese dinero no se usa para, por ejemplo, hacer más casas de acogida donde mujeres maltratadas y prostituidas puedan refugiarse mientras recomponen sus vidas (además que estos centros son como prisiones donde apenas les dan de comer y no hay ni calefacción).
También es luz de gas cuando el presidente del COI dice que "no existe forma científica de demostrar quien es una mujer".
¿Me estás tomando el pelo? O sea, esto debe ser una puta broma, porque no puede estar hablando en serio. Pero lo hace, en una rueda de prensa ante el mundo entero. Que no se puede saber quien es hombre ni mujer, que no hay forma de saberlo. ¿Se mirará al espejo y se preguntará cual es su sexo, o el suyo propio si lo tiene claro? Pues que pregunte a los talibanes, que saben muy bien a quien le ponen el burka. Ellos nos distinguen perfectamente, fíjate tú. Cuando se trata de maltratar, violar o esclavizar, de prohibirnos estudiar, trabajar, conducir, abrir una cuenta en el banco o votar, todos saben quien es una mujer (podría preguntar a Franco, otro que lo tuvo muy claro). Cuando quieren comprar un bebé, cuando quieren prostituir a alguien, cuando necesitan que alguien les friegue la taza del wáter o le cambie los pañales al abuelo, ahí todos saben quien es una mujer. Solo cuando queremos espacios seguros en los vestuarios, los deportes o las prisiones, ahí es donde les entra la duda. Mecachis, que mala suerte, ya es casualidad.
Otro ejemplo de Gaslight es cuando los medios de comunicación llaman "mujer", a un tipo, aunque podemos verle el paquete bajo el pantalón. Dice que "siempre se sintió mujer", a pesar de que está casado y con hijos, Me pregunto si se sentía mujer cuando usaba su pene para fornicar con su esposa, algo que las mujeres hacemos habitualmente, como todo el mundo sabe.
Por cierto, la mujer a la que ha robado la medalla olímpica es esta. ¿Dónde están ahora las "afrofeministas" que nos llamaban racistas por defender a las mujeres de un hombre árabe? Según ellas solo las defendíamos por ser blancas europeas. ¿Y ahora, que es al revés, que el tramposo es blanco? Su silencio es ensordecedor.
Es luz de gas que la revista Elle diga que este tío de pelo en pecho es "la mujer más increíble de Canadá".
Durante la última década la sociedad occidental ha sufrido el gaslight más gigantesco de la historia de la humanidad: negar que el sexo es biológico, que es binario, que se crea en el mismo momento de la concepción, y que es inmutable. Negar la esencia misma de la humanidad, lo que significa ser humano. Negar incluso la forma en que se crea la vida.
Cada vez que un presentador de televisión, un periodista, un político, etc, llama "mujer" a un hombre, te está haciendo gasligth. Es decir, te está maltratando. El objetivo está claro; borrar a las mujeres es solo el principio. Si bien borrar el termino "madre" puede facilitar a la sociedad admitir la compra-venta de recién nacidos, el objetivo final es aún más perverso: el transhumanismo. Empiezan negando que el sexo biológico sea real y signifique algo, y pronto ser un ser humano ya no significará nada en absoluto. Pero es un tema largo para explayarme ahora.
Si no quieres que controlen tu mente, no uses su lenguaje. Un hombre disfrazado de mujer no es una mujer, es un travesti. Un hombre que entra en los baños de mujeres, es un pervertido. Un hombre que compite en categoría femenina, es un tramposo. Un hombre que pide el traslado a una prisión de mujeres, un depredador. No los llames mujeres, no uses sus pronombres, no cedas. El destino de la humanidad está en tu lengua.
“La herramienta básica para la manipulación de la realidad es la manipulación de las palabras. Si puedes controlar el significado de las palabras, puedes controlar a la gente que debe usar las palabras.” Philip K. Dick.
"Quien controla el lenguaje, controla el pensamiento". Liebreblanca.