Ingredientes:
-Una taza de copos de avena.
-Salsa de soja.
-Especias.
-Pan rallado.
Elaboración:
Ponemos en un recipiente cualquiera una taza de copos de avena, una taza de agua, y un chorrito de salsa de soja, para darle color y sabor. Lo dejamos reposar toda la noche; esto es importante para que la soja sea más digerible. Si no la remojo, me da dolor de tripa. Al día siguiente la escurrimos bien; añadimos las especias y removemos, luego añadimos dos o tres cucharadas de pan rallado, removemos bien, y lo volvemos a dejar reposar. Después de unas horas, la avena coge el sabor de las especias, y el pan rallado absorbe la humedad, dándole firmeza a la masa. Puedes guardar la pasta en la nevera varios días. Cuando las vayas a comer, te mojas las manos, coges un poco de masa con las manos, le das forma, y la echas en una sartén antiadherente para hacerlas a la plancha. Comerlas bien calientes, frías no valen nada.
Comentarios:
Esta receta, además de estar muy buena, es super fácil de hacer. Siempre tengo un táper con avena en la nevera; así, si no me apetece cocinar, hago unas hamburguesas a la plancha en unos minutos. Llenan bastante, son muy saludables, y realmente baratas. Un paquete de copos de avena cuesta 80 céntimos, así que calculo que un par de hamburguesas salen por menos de diez. La única pega es que a mucha gente no le gusta la avena, así que no es algo que serviría a mis invitados.

No hay comentarios:
Publicar un comentario