sábado, 4 de enero de 2014

Brisa


Cuando fui al parque hace uno vi a una niña dandole con un palo a una tórtola mientras repetía que "¡no sabe volar!". La he espantado y he cogido a la pobre echandole mi bufanda por encima. Me he ido corriendo al veterinario de mi barrio porque era mediodía e iban a cerrar; he llegado a tiempo, pero solo estaba la dependienta, la veterinaria se ve que solo viene a ratos.

Hemos llamado a Torreferussa, al refugio de animales salvajes, pero son ecologistas y solo recogen animales en peligro, y la protectora solo recoge animales domésticos.  Luego ha llamado a la veterinaria y nos ha aconsejado la eutanasia, porque total no va a volar nunca más , aunque "si te la quieres quedar habría que amputarle el ala". Le he dicho que me lo pensaría y me he vuelto a casa (llevaba la perra en una mano y el pájaro en la otra).

Como amputar el ala por un hueso roto me parece una barbaridad, he pedido una segunda opinión. He ido con la tórtola a mis veterinarias, y resulta que el ala no está rota, solo es un esguince y se curará sola en unas semanas. Así que la he llevado a su casa de acogida, que la pobre lleva 3 días en un transportin y estaba estresada (aunque mis animales no le hacían nada; Merlin se frotaba contra la jaula y Frodo se la quedaba mirando como si mirase la tele, son más dulces mis niños).
Ya no está encerrada, tiene 100 metros de terraza llena de plantas para pasear y tomar el sol. Si se recupera puede irse cuando quiera, pero si no pudiese volar al menos no está en una jaula.

¿Que le cuesta a la gente ser un poco humilde y decir "no entiendo de pájaros, ve a un especialista en exóticos"? No se iba a morir por eso, digo yo.

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