Soy el "más difícil todavía": vegana, celiaca e hipotiroidea. No puedo comer nada con gluten (llevaba cuatro años con diarrea crónica y en una semana de dieta se me ha quitado), ni soja, ni avena. La avena no se ponen de acuerdo los expertos si las podemos comer, a si que de momento la voy a dejar; no me merece la pena el riesgo. Y la soja, tampoco se ponen de acuerdo si daña la tiroides en personas sanas, pero en hipos parece que ya es seguro que si, y además impide que absorbas la medicación. Si tomas soja necesitas una dosis más grande para que te haga efecto, así que fuera también.
Pero no pasa nada. Cuando me encontraron el hipo cambié la soja por avena para hacer leche y hamburguesas caseras. Ahora he cambiado a la leche de arroz (que está buenísima, por cierto), y voy a ir probando hamburguesas de mijo (la comí en la Fira de la Terra y está muy buena), de legumbres, pan de maíz, etc.
Lo que no se puede es comprar casi nada preparado, porque todos los sustitutos de la carne (hamburguesas, franfurts, embutidos), usan gluten, y los productos para celiacos, casi ninguno es vegano. Las magdalenas por ejemplo, llevan huevo. Al principio andaba loca buscando que puedo comer; encontré una cerveza sin gluten y estuve a punto de comprarla. Luego me dije "¿pero que haces, si tu no bebes cerveza?", y la dejé. Jajaja, la novedad, luego todo vuelve a su cauce.
No compro productos precocinados, lo hago todo yo: arroces, guisos, legumbres, verdura hervida, a la plancha, al horno, salteada, cremas y sopas... Fuera de casa, depende; ayer comí en casa de una amiga que es buena cocinera, me hizo garbanzos con espinacas y de segundo champiñones al ajillo, para chuparse los dedos. En cambio mi madre apenas sabe cocinar, así que para que no se agobie le he dicho que me haga arroz blanco y patatas fritas. A mi no me importa comer lo mismo todos los domingos. El primer día me contaminó porque usó el aceite de freír las croquetas... pero les deje a todos un perfume, que ¡ya no se les olvidará más!
La pena es que, para salir por ahí a tomar algo, siempre pedía patatas bravas sin mayonesa. Ahora no puedo arriesgarme, si no tienen una freidora exclusiva para las patatas me paso una semana con diarrea. Me tocará tomar un zumo y mirar como comen los demás.
De todas formas estoy contenta. Mi hermano tiene alergia a los gatos. Si viene a casa se tiene que ir en 5 minutos porque se le ponen los ojos rojos y empieza a estornudar. Yo, mientras pueda vivir rodeada de perros y gatos, soy feliz. Prefiero mil veces tener problemas con el gluten.
A partir de ahora, todas mis recetas sin gluten ni soja, y por supuesto, veganas.
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