viernes, 20 de septiembre de 2013

Frodo



Frodo es un gatito con suerte. Nadie lo diría viendo esa foto. Seguro que en ese momento él tampoco se sentía muy afortunado. Su familia lo abandonó en la calle, donde un gato casero, manso y bueno, no tiene ninguna oportunidad. Pero encontró una colonia controlada, donde alguien le traía comida cada día, así que sobrevivió. Luego se puso muy enfermo, pero la voluntaria que cuidaba la colonia le recogió. Fue a parar a una perrera, donde recibió tratamiento; aunque estuvo muy enfermo, volvió a sobrevivir.
Entonces se le hicieron los test de rutina, y dio positivo a leucemia. Aquí empieza realmente su buena suerte. En esa perrera, como en todas, a los animales enfermos crónicos se les sacrifica sin más. Pero daba casualidad que eran vacaciones, así que los jefes no estaban. La veterinaria, arriesgando su puesto, retrasó todo lo posible su asesinato, mientras unas voluntarias le difundían. ¿Y como podría resistirme a esta carita?



Debo tener una vena masoquista, porque en vez de adoptar cachorritos sanos con los que convivir muchos largos años, siempre acabo adoptando adultos enfermos. Se que su esperanza de vida es más corta, y se que en unos años me abandonará, rompiendome el corazón en mil pedazos. Pero merece la pena todo el esfuerzo y todo el sufrimiento, si con eso le das una oportunidad a alguien que no tenia ninguna.
Frodo sabe la suerte que ha tenido, y el tiempo que le quede, poco o mucho, lo disfruta el doble.


Frodo es afortunado porque es amado. Nunca volverá a estar solo. Aunque en casa no nos sobra ni el dinero, ni el espacio, si nos sobra el amor, y nos hemos apretado un poco más para hacerle un hueco. Bienvenido a la familia.



"Muchos de los que viven merecen morir y algunos de los que mueren merecen la vida. ¿Puedes devolver la vida? Entonces no te apresures a dispensar la muerte, pues ni el más sabio conoce el fin de todos los caminos." J. R.R. Tolkien.

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