Santuarios felinos

Mucha gente sigue creyendo que los gatos viven muy bien en la calle, que saben "buscarse la vida", que "se las apañan". Nada más falso. Los gatos que nacen en las calles viven vidas cortas y miserables. La mayoria de los cachorros muere en pocos meses, solo su alta natalidad hace que sigan aumentando las colonias. Si consigue vivir lo suficiente para destetarse se enfrentan a una vida plagada de peligros: epidemias, coches, perros, humanos que les envenenan por considerarlos una plaga... además del hambre. La ciudad no es el habitat natural para los gatos, las ratas viven en las alcantarillas y la mayoria de los callejeros depende de la bondad humana para sobrevivir. Si la persona que alimenta a una colonia muere, se muda, se enferma, o por cualquier otro motivo tiene que dejarlo, los gatos quedan abandonados a su suerte.
La eutanasia en las perreras no es la solución. Todos los que hemos nacido tenemos el mismo derecho a vivir. Encerrarlos de por vida en una jaula tampoco. No han cometido ningún crimen para merecer la cadena perepetua. ¿Que se puede hacer con todos esos gatos adultos, ancianos, timidos, salvajes, enfermos, que nadie adoptará? Los santuarios son la solución. Un lugar seguro en semi-libertad.
En http://protegerlosinocentes.es/ han creado un santuario felino y otro canino, para animales ancianos y enfermos que nadie quiere. Necesitan toda la ayuda posible.